¿Manifestar al universo me ayudará?
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- 11/09/2023
¿Alguna vez has oído hablar de las manifestaciones? ¿te has preguntado si realmente funcionan para obtener todo lo que deseamos? Te invito a seguir leyendo porque en este artículo aclararemos si manifestar al universo es realmente útil o no para conseguir cualquier cosa que queramos.
Foto por: Ivan Samkov en Pexels
Tiktok y demás redes sociales están repletas de audios que se categorizan precisamente como “audios para manifestar»: ¿cómo manifestar la vida que quieres?, ¿cómo manifestar una relación? y un montón de cosas, todo esto nos hace reflexionar sobre la utilidad de lo que ahora consideramos «la moda de manifestar», pero ¿qué es una manifestación?
¿Qué es una manifestación o manifestar?
Una manifestación, en palabras de la autora Rhonda Byrne, cumple la “lógica” de que todo lo que llega a tu vida es porque lo has atraído, y los has atraído por las imágenes que tienes en tu mente y porque lo pides con fuerza al universo.
Bueno, ya sabemos que es una manifestación, pero ¿funciona? Para contestar a esta pregunta hablaré desde algunos puntos de vista de la psicología.
De manera científica no existe evidencia de que el invocar al universo realmente funcione y no hay una teoría hasta la fecha que afirme al cien por ciento que existe una especie de conexión entre el universo y su influencia en los eventos que puedan o no ocurrir en nuestro presente, pero indaguemos más.
Foto por: Nothing Ahead en Pexels
¿Qué relación tienen las manifestaciones con la felicidad?
Los doctores en Psicología y Sociología Eva Illouz y Edgar Cabanas, en su libro Happycracia explican que la felicidad ha sido utilizada como herramienta de control social, en donde se impone la idea de que estar feliz es por nuestro bien y que, por lo tanto, esa es la misión de vida de todo ser humano.
Estos autores denominan a este hecho como una felicidad cruel, puesto que, la ideología de que el ser humano “debe” ser feliz, hace parecer que la persona que no es feliz es porque “simplemente no quiere serlo”, y esta afirmación deja completamente de lado las circunstancias que pueden rodear a la persona en sí.
Y el intento de manifestar al universo, prácticamente lleva de trasfondo encontrar la felicidad que se cree que aún no se tiene, por lo general por la “escasez” de algo físico, material o incluso emocional.
Al momento de utilizar la manifestación, la persona desea acabar con su “carencia” de la manera más pronta posible, pero, como explican los autores ya mencionados, puede que la persona ni siquiera se dé cuenta que la presión social de ser feliz (una felicidad utópica, donde se tiene que ser feliz 24/7) es la que le impulsa a crear una idealización. La realidad es que el problema en si no está siendo resuelto, simplemente se ha escondido en una cortina de felicidad forzada, y si la manifestación no se cumple puede que se experimente frustración.
Foto por: Samir Jammal en Pexels
La capacidad de autocrítica
Otro aspecto de la manifestación es que te invita a que pienses de una manera muy distinta a como lo haces actualmente, básicamente te incita a la famosa “transformación”, pero ¿hasta qué punto es aceptable esta invitación?
El psicólogo Rubén González, habla sobre nuestra capacidad de autocrítica, esta es la habilidad de analizar nuestro ser, desde nuestras fortalezas sin dejar de lado nuestras dificultades. También explica en un libro de su autoría que la capacidad de autocrítica se puede ver bloqueada por la creación de idealizaciones, sobre los demás y claro sobre el propio ser.
Asimismo hay que considerar que la autocrítica no siempre es nuestra aliada, sin embargo, llevándola de una manera adaptativa, permite establecer planes que sean un poco más objetivos y sobretodo realistas, puesto que se toman en cuenta todas las circunstancias en las que una persona se desenvuelve.
Si se confía que, por manifestar un cambio al universo, éste se concederá de manera casi automática, se está creando precisamente una fantasía sobre lo que “podría ser”, dejando de lado la capacidad de autocrítica adaptativa, llegando a perderse en una imagen de un futuro incierto, sin tomar en cuenta al presente y sus circunstancias.
Incluso, la manifestación al universo, puede paralizar nuestra vida, porque pareciera que toca esperar que las cosas sucedan, pero mientras tanto ¿qué responsabilidad tenemos nosotros en el cumplimiento de nuestros deseos o sueños? Es algo para reflexionar, no solo se trata de pedir, se trata de accionar para tener la vida que deseamos.
Entonces, ¿manifestar al universo me ayudará?
Como ya se comentó, las manifestaciones no se basan en una teoría científica que explique tal cual como el universo tiene influencia en el destino o las decisiones de las personas, ahora bien, se puede utilizar la manifestación como una motivación para seguir adelante ante los retos que enfrentemos en la vida, siempre y cuando no se coloquen en ella expectativas que se escapen de nuestra realidad.
A esto podemos añadir que, cuando escuchamos y validamos nuestras emociones, se abre un camino a entender nuestro comportamiento y adaptarnos a nuestro entorno. Por lo tanto, si quieres recurrir a la manifestación, solo toma en cuenta el no caer en querer escapar demasiado de tu realidad.
¡Muchas gracias por darle la oportunidad a Kathartiko de traerte temas en tendencia, estoy segura que nos leeremos de nuevo! Y recuerda, el gestionar tu salud mental jamás pasará de moda.
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Referencias:
Byrne, R. (2007). El Secreto. Urano.
González,R. (2019). Tenemos La Pareja Para La Que Nos Alcanzó. Editorial Mina Estrella.
Illouz E., Cabanas E. (2019). Happycracia: Como La Cuiencia Y La Industria De La Felicidad Controlan Nuestras Vidas. Ediciones Paidós.